domingo, 10 de septiembre de 2017

PAELLA MARINERA


Para enriquecer un arroz no hay mejor manera que combinarlo con los mejores ingredientes. Admite carne, pescado, vegetales... y, como no, marisco. Hoy nos hacemos eco de un paella sencilla a base de frutos del mar, en su mayoría bivalvos. Su confección no ha sido exclusivamente mía, sino compartida con Fito (gran parrillero galaico-andorrano) y Abril (la pequeña pinche) que la ha redondeado con su toque final de perejil. Gracias.

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA

Arroz bomba   /   AOVE   /   Mejillones   /   Almejas   /   Berberechos   /   Calamar   /   Langostinos   /   Cebolla   /   Pimiento verde   /   Pimiento rojo   /   Ajo   /   Tomate   /   Azafrán   /   Fumet de pescado y marisco*  /   Vino blanco (albariño)   /   Sal   /   Limón   /   Perejil

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA

Aunque la paella se podría hacer en una olla de acero inoxidable baja y de un diámetro amplio, no hay mejor recipiente que una buena paellera. Por ello, este será nuestro punto de partida.

Pondremos a calentar la paellera con un chorro generoso de aceite. Una vez caliente añadimos, bien picadas, las verduras, comenzando por la cebolla, el ajo y el pimiento verde. Dejamos pochar unos minutos y luego añadimos el pimiento rojo y el tomate. Las cantidades dependerán del tamaño de la paella, pero sobre una cebolla, dos o tres dientes de ajo, medio pimiento verde y medio rojo, y un buen tomate maduro. Salamos. Para evitar que se nos quede sin líquido, añadimos un chorrito de vino blanco. Dejamos cocinar a fuego medio, removiendo de vez en cuando para que no se nos pasen.

Mientras, coceremos nuestros bivalvos (berberechos, almejas y mejillones) debidamente limpios y lavados, en una olla con dos dedos de agua y un chorro generoso de vino. Esta cocción se detendrá cuando los moluscos se hayan abierto. En ese momento, colamos el agua y la reservamos para añadir a nuestra paella. El marisco lo añadiremos casi al final de la elaboración del plato.

Continuamos con la paellera y su contenido. Sin que se nos peguen las verduras, siempre levemente hidratadas, añadimos un calamar cortado en anillas no muy gruesas, y dejamos que se vaya cocinado (irá soltando también su jugo). Iremos removiendo verduras y calamar durante un par de minutos, para luego añadir el arroz (aproximadamente un pocillo por persona, más o menos). Removemos bien el arroz y añadimos el agua de los moluscos que teníamos reservada, así como el doble de caldo que de arroz. Mezclamos un poco, dejamos que se cocine y, una vez que vaya reduciendo el líquido, añadimos las hebras de azafrán, y un poco más de sal si lo creemos necesario. Podemos remover si vemos que se nos quiere pegar el arroz, añadiendo más caldo en pequeñas cantidades. Dejamos cocinar a fuego suave durante unos 10 o 15 minutos, tanteando que el arroz vaya cocinando. Cuando creamos que al arroz le faltan cinco minutos, añadimos los langostinos enteros, los mejillones, las almejas y los berberechos.

Encendemos el horno a 180º para luego darle el último golpe de calor a la paella. Para ello, antes de introducir la paellera en el horno, espolvoreamos el perejil, la tapamos con papel de aluminio y la dejamos unos 10 minutos más.

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

Situaremos la paellera en un lugar accesible para todos los comensales e iremos sirviendo, tras previamente terminar de adornar la paella con unos gajos de limón. Lo ideal es que el arroz haya agarrado un poco, dejando un toque tostadito sabroso. ¡No olvidéis rociar el arroz con el limón!

¡Ñam, ñam!



*El fumet o caldo de pescado lo hemos adquirido ya elaborado. No obstante, si queréis, podéis prepararlo vosotros mismos tostando las cabezas de los langostinos en un poco de aceite, luego los añadimos a una olla con agua en la que coceremos a fuego medio, un puerro, una cebolla, una zanahoria, medio pimiento rojo y medio tomate, junto con alguna cabeza o raspa de pescado (rape, merluza, bacalao...). Todo ello perfectamente aderezado con sal. Incluso podéis enriquecer este fumet con el agua de cocción de algunos mariscos (mejillones, almejas, berberechos...), como ha sido nuestro caso de hoy.

jueves, 7 de septiembre de 2017

FABADA GALAICA

¡Que hoy apetece un buen plato de cuchara! ¡Que es verano y hace mucho calor! Igual que os digo que en invierno se pueden comer ensaladas, pues en verano también se pueden tomar guisos. Y por ello aquí os traigo mi versión de la fabada o guiso de habas, en el que destacan elementos del cerdo, pero no de cualquier cerdo, sino del "porco celta", una raza propia del noroeste peninsular. ¡Coged pan, que os va a hacer falta!

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA

Habas o alubias blancas   /   Lomo de "porco celta"   /   Chorizo de "porco celta"   /   Panceta de "porco celta"   /   Cebolla   /   Ajo   /   Zanahoria   /   Pimiento verde   /   Tomate   /   Pimiento rojo   /   Vino blanco   /   Caldo de verduras   /   Sal

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA

Habremos puesto a remojo un par de tazas de habas en bastante agua, que las cubra holgadamente. Habrán estado más de ocho horas, así que, mejor de un día para otro.

Picamos las panceta y el lomo en trozos pequeños. En la olla donde vayamos a preparar todo, mejor si es de acero inoxidable, ponemos a calentar un chorro de aceite (tres cucharadas soperas). Una vez caliente añadimos la carne, de manera que solamente se dore, para luego retirarla. En el mismo aceite, pochamos la cebolla, el ajo y la zanahoria picados. Removemos bien para que no se nos quemen (a fuego medio) y echaremos un chorrito de vino blanco. Transcurridos unos minutos añadimos un tomate pequeño pelado y un cuarto de pimiento verde y rojo picados. Salamos, dejamos que se integren las verduras y añadimos el caldo con las habas, quedando estas cubiertas por el líquido. En cuando rompar a hervir, espumamos si es necesario, e incorporamos el chorizo en rodajas. Dejamos cocer hasta que las habas estén blandas.

Como ya sabréis, este tipo de guisos mejoran a medida que se recalientan. Por eso, dejaremos que enfríe y, mejor al día siguiente, degustaremos la preparación. Si no podéis esperar, lo que haréis será retirar algunas habas, triturarlas e incorporarlas al guiso, para que lo espesen.

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

Un buen plato hondo o cazuelita de barro son el recipiente ideal para esto exquisito manjar. ¡No olvidéis disponer de un buen pan para mojar y una jarra de buen vino tinto!


¡Ñam, ñam!


viernes, 1 de septiembre de 2017

POLLO AL CURRY CON PIÑONES SOBRE CREMA DE COLIFLOR


La coliflor ofrece muchas posibilidades más allá de Nochebuena. Hoy os traigo una de ellas en lo que podéis considerar dos recetas en una, ya que combinaremos una deliciosa crema de coliflor con un pollo al curry con piñones que, aunque por separado pueden resultar atractivos, juntos suponen un auténtico gusto al paladar.

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA

Pechuga de pollo   /   Piñones   /   Sal   /   Curry   /   Coliflor   /   Crema de leche (nata para cocinar)   /   Pimienta negra   /   Nuez moscada   /   Mantequilla   /   Aove   /   Orégano

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA

Vamos a empezar con la crema de coliflor. Para ello, en una olla de acero inoxidable incorporamos media coliflor cortada en trozos pequeños para que se nos cocine antes; la rehogamos con 75 cl de nata líquida o crema de leche (poca cantidad porque la coliflor suelta bastante agua) y salpimentamos y añadimos un poco de nuez moscada. Dejamos cocinar a fuego suave alrededor de 15 o 20 minutos. Una vez cocinado, sacamos del fuego y pasamos la batidora hasta obtener la crema. Reservamos.

Para preparar el pollo, cortamos la pechuga en dados y le echamos un poco de sal, una cucharadita de café de curry en polvo, y un chorrito de aceite. Dejamos macera durante media hora. A continuación, en una sartén o wok, ponemos a dorar un puñado de piñones (un minuto, más o menos), añadiendo el pollo. Dejamos que se dore y se vaya haciendo a fuego medio. Irá soltando sus jugos. Cuando el pollo esté listo, sin que se nos quemen los piñones, retiramos.

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

En una fuente o plato llano, situamos una cucharada o dos de la crema de coliflor, aplastando el centro y haciendo giros; de esta manera creamos como una pequeña cama sobre la que incorporaremos una ración del pollo con piñones al curry. Espolvoreamos con un poco de orégano y ya podéis disfrutar de este rico plato.

La crema de coliflor la podéis combinar con cualquier otra carne o pescado, e incluso la podéis utilizar como aliño de un buen plato de pasta.


¡Ñam, ñam!

viernes, 21 de julio de 2017

PIZZA DE SALMÓN Y DOS QUESOS


El salmón se presta a todo. Hoy lo convertimos en ingrediente principal de una pizza. ¿Qué os parece? Seguro que una vez que la hayáis probado, os animáis a repetirla. No os dará pereza tener que amasar un poco para obtener un resultado digno de cualquier maestro pizzero y buen anfitrión. Esta es un receta para disfrutar con amigos de una buena comida, picoteo o cena. ¡No perdáis la ocasión de luciros!

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA

Lomo de salmón   /   Harina con levadura (especial para pizza)   /   Agua   /   Aove   /   Sal   /   Queso de cabra suave   /   Queso havarti   /   Orégano   /   Pimienta negra   /   Pimiento verde italiano   /   Concentrado de tomate

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA

Comenzamos preparando la masa. Para ello, disponemos en un bol alrededor de 250 g. de harina (yo empleo ya una que incorpora la levadura, pero si no disponéis, no tenéis más que incorporársela vosotros). Añadimos una pizca de sal y hacemos un volcán y en el que verteremos medio vaso de agua templada y un buen chorro de aceite. Mezclamos poco a poco con ayuda de un tenedor o espátula durante un minuto, para luego ya trabajar con las manos. Amasamos bien durante 10 minutos. Si nos pide un poco más de aceite o harina, se la añadimos (pero sin dejarnos llevar). Hacemos una bola con ella y la dejamos reposar durante un mínimos de 30 minutos tapada y en un lugar templado, para que aumente.

Mientras, limpiamos el salmón de espinas y piel, lo cortamos en dados y lo reservamos. Lavamos el pimiento verde y lo cortamos en rodajas, evitando que nos vayan semillas.

Encendemos el horno a 240º. Tras pasar la media hora, retomamos la masa y le damos un nuevo amasado para eliminar el aire que pueda quedar tras la fermentación y procedemos a estirar sobre un papel vegetal, una bandeja untada con aceite o, como en mi caso, una plancha de silicona específica. Le damos forma (yo rectangular) y hacemos un borde doblándola hacia el interior por todo su perímetro.

Comenzamos, luego, a añadir ingredientes. Untamos toda la superficie de la salsa de tomate concentrada, añadimos las rodajas de pimiento y luego el salmón, que aderezamos con un poco de sal y pimienta negra molida. Añadimos, finalmente, los dos quesos: el de cabra suave y el havarti. Finalizamos con un poco de orégano y, si queréis, un poco de aove. Metemos en el horno durante 20 o 25 minutos, estando pendientes de que no se nos queme. Cuando veamos que ya está, o un poco antes, apagamos el horno y dejamos reposar unos minutos.

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

Esta pizza es deliciosa y el salmón os va a quedar muy suave y jugoso. Troceadla en pequeñas porciones y servidla templada. Una buena botella de vino blanco, bien fresquito, complementará su degustación.

¡Ñam, ñam!


domingo, 16 de julio de 2017

BIZCOCHO O TARTA DE CEREZAS


Estamos en plena temporada de cerezas, una de las frutas rojas más ricas y sabrosas. Se emplean para hacer mermeladas, licores y, por supuesto, postres. Hoy os traigo el típico dulce o tarta tradicional relleno de cerezas. ¡No perdamos tiempo y vamos a ver cómo se hace!

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA

1/4 k. de cerezas deshuesadas   /   4 huevos   /   aceite de girasol   /   150 g. de azúcar   /   1 yogur natural   /   300 g. de harina tamizada   /   1 sobre de levadura tipo Royal   /   1 cucharada de postre de esencia de vainilla   /   Mantequilla   /   Papel vegetal

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA

Ponemos a calentar el horno a 180º, pues la mezcla de la tarta pronto la elaboraremos.

Batimos en un cuenco los cuatro huevos con el azúcar hasta que blanqueen o cojan cuerpo. A continuación, mientras seguimos batiendo, añadimos 150 ml. de aceite, el yogur natural y la harina tamizada mezclada con la levadura. Batimos bien.

Preparamos un molde redondo desmoldable forrando su base con el papel vegetal y las paredes con mantequilla. Echamos nuestra mezcla en el molde y luego esparcimos las cerezas. Si queréis podéis remover para que las cerezas queden bien recubiertas. 

Metemos en el horno durante 45 o 50 minutos o hasta que, al atravesar el dulce con un palillo, éste os salga limpio. 

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

Este dulce es ideal para la merienda o el desayuno. Las cerezas se habrán cocinado y le aportan un rico sabor al conjunto. ¡Partid la tarta en gajos y ofrecedla a vuestros invitados! ¡Un buen vino tinto será el acompañamiento ideal!

¡Ñam, ñam!

viernes, 14 de julio de 2017

ENSALADA DE LECHUGA, AGUACATE Y RABANITOS


Estamos en época de ensaladas. Hoy os muestro una sencilla y rápida, al tiempo que saludable. Es ligera y muy sana para una cena de verano. 

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA

Lechuga   /   Aguacate   /   Rabanitos   /   Nueces peladas   /   Aceite de oliva virgen extra    /   Vinagre de Jerez   /   Sal

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA

Lavamos y escurrimos la lechuga. Lavamos los rabanitos y les quitamos el pedúnculo, para luego lonchearlo finamente. Pelamos el aguacate y le extraemos la pepita, para poder cortarlo en dados. 

En una fuente honda amplia cortamos la lechuga en trozos a nuestro gusto, añadimos los dados de aguacate y los rabanitos. Además, incorporamos unas nueces peladas que le darán un toque crujiente.

Finalizamos con el aliño de aceite, vinagre y sal (opcional).

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

Las ensaladas lucen mucho en pequeños boles o cuencos individuales, pues os permiten tasar bien las cantidades. Acompañamos esta ensalada con un poco de pan tostado en cualquiera de sus variantes.

¡Ñam, ñam!


domingo, 11 de junio de 2017

SALMÓN EN HOJALDRE


Hoy os traigo una receta bien sencilla y al mismo tiempo llena matices, pues en ella van a convivir salmón, avellanas, gambas y cebolla caramelizada; todo ello dentro de una masa de hojaldre que hará la delicia de vuestros paladares. ¡Ahí va!

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA

Un buen lomo de salmón   /   Una lámina de hojaldre   /   Gambas peladas   /   Avellanas tostadas   /   Pimienta negra   /   Sal   /   Cebolla caramelizada  /   Leche   /   Harina   /   Nuez moscada   /   Aceite de oliva virgen extra

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA

Aunque podéis optar por una lámina de hojaldre rectangular, yo he decidido partir de una redonda, porque me ha permitido presentar esta receta en forma de media luna.

Comenzamos. Primero elaboraremos la bechamel. Para ello, ponemos a calentar un cazo con leche. Una vez caliente, sin que hierva, echamos un chorro de aceite en una sartén antiadherente, dejamos que caliente y añadimos una cucharada de harina, removemos con una espátula de madera y añadimos un chorro de leche. Repetimos esta maniobra de manera que tengamos una mezcla cremosa y sin grumos, condimentando con un poco de nuez moscada. Las cantidades y la textura dependerán de vosotros, pero no la espeséis demasiado, pues al enfriar se pondrá más consistente (algo que no queremos). Reservamos.

Precalentamos el horno a 180º por arriba y por abajo.

Seguidamente, limpiamos el lomo de salmón de espinas (si es necesario utilizad unas pinzas de depilar para extraerlas) y de piel (se la quitaremos con ayuda de un cuchillo bien afilado y de hoja fina, poniendo la piel hacia abajo y recorriendo con el filo de un lado a otro entre la piel y la carne). Una vez limpio el salmón, lo salpimentamos.

Desenrollamos la masa de hojaldre, situando el salmón de la mitad hacia un lado (la intención es hacer una empanadilla grande). Sobre el salmón extendemos un poco de bechamel (la justa para cubrir bien su superficie) e incorporamos también las gambas peladas, la cebolla caramelizada y unas avellanas ligeramente trituradas (granuladas). Con la otra mitad de la oblea de hojaldre cerramos nuestra gran empanadilla. Para sellar, mojamos un pincel en leche y con un tenedor vamos pisando los bordes. Aprovechamos y pintamos todo el hojaldre con leche. Podéis hacer unas tiras decorativas para colocar encima. Reservamos en la nevera unos 20 minutos.

Finalmente, introducimos nuestro hojaldre relleno en el horno en una bandeja con papel vegetal. Dejamos transcurrir unos 20 o 25 minutos y sacamos. Dejamos atemperar un poco y ya podéis serviros una ración.

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

El aspecto del hojaldre relleno recién salido del horno es tan agradable que da pena romperlo; pero no se cocina para contemplar, sino para probar. Es el momento de ver cómo ha queda  en su interior, así que dadle un corte y haced el reparto de raciones. ¡Que lo disfrutéis!


¡Ñam, ñam!

martes, 6 de junio de 2017

TARTA DE PLÁTANO

¿Qué hacer cuando compras demasiados plátanos y no llegas a consumirlos, teniendo que tirarlos? ¡La solución ha llegado en forma de tarta! Su aroma y sabor os harán amar los plátanos. Os servirá de postre, desayuno y merienda. ¡No dudéis y lanzaros a elaborarla!

INGREDIENTES   /   MATERIA PRIMA

3 o 4 plátanos maduros   /   3 huevos   /   2 o 3 claras de huevo   /   Azúcar moreno  (un vaso de yogur / 150 gr.)  /   Harina (dos tazas / 350 gr.)   /   Levadura Royal  (un sobre) /   Aceite de oliva virgen extra   (un vaso de yogur  / 100 gr.).

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA

Comenzamos pelando los plátanos y machacándolos bien con un tenedor en un cuenco o plato hondo. Reservamos.

Antes de comenzar a mezclar los ingredientes, encendemos el horno a 180º por arriba y por abajo. También preparamos un molde, preferiblemente desmoldable, forrado con papel vegetal. Si no disponéis, podéis untarlo con manquetilla.

En un bol batimos los tres huevos más las claras y el azúcar. Batimos con una batidora de varillas, pues nos resultará más fácil. En cuanto la mezcla haya aumentado su volumen, incorporamos el aceite. Batimos y añadimos los plátanos. Seguimos batiendo y añadimos la harina tamizada y mezclada con la levadura en varias veces. Batimos bien y vertemos sobre el molde, dándole unos golpecitos para que la masa quede bien repartida. Introducimos en el horno y esperamos alrededor de 50 minutos o hasta que, al introducir un palillo, éste salga limpio.

Una vez transcurrido el tiempo de cocción, sacamos del horno y dejamos enfriar a temperatura ambiente. Será entonces el momento de desmoldar nuestra tarta.

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

Podéis cortar la tarta en porciones y acompañarla de un buen zumo o taza de leche chocolateada. A mí me gusta que no se enfríe de todo y probarla templada -no caliente- pues el aroma a plátano es más intenso. ¡Que la disfrutéis!

¡Ñam, ñam!


domingo, 5 de marzo de 2017

ENSALADA DE BACALAO MARINADO

El bacalao suelo comprarlo en salazón pensando en cocerlo con unas buenas patatas. Pero, cuando lo he puesto a desalar la última vez que lo he comprado, me he dado cuenta de que elaborar con él una ensalada no me iba a resultar difícil. Y así fue. ¿Os muestro cómo? ¡Ahí va!

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA

Lomo de bacalao en salazón   /   Zumo de limon   /   Aceite de oliva virgen extra   /   Cayena   /   Ajo   /   Pimientos de piquillo en conserva   /   Maíz tostado   /   Lechuga   /   Queso fresco de vaca   /   Anchoas en conserva   /   Aceitunas negras sin pepita

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA

Comenzamos poniendo el bacalao a desalar en agua de un día para otro. Una vez desalado (no del todo, evidentemente, pues necesitamos que mantenga un leve sabor salado), le quitamos las espinas y la piel, lo desmigamos y lo ponemos en un recipiente metálico que lleve tapa, pues procederemos a marinarlo.

Para marinarlo, le añadimos un buen chorro de aceite de oliva, zumo de limón, dos dientes de ajo machacados y dos cayenas (si no os gusta el picante, podéis obviarla). Tapamos y dejamos marinar un mínimo de 10 horas.

Transcurrido el tiempo de marinado, es el momento de preparar la ensalada. En un plato liso colocamos un par de pimientos de piquillo abiertos y limpios de semillas. Sobre él ponemos un poco del bacalao. Sobre esta base principal iremos añadiendo nuevos ingredientes que aportarán color y sabor: un poquito de queso fresco de vaca desmigado con los dedos, una hoja pequeña de lechuga muy picada, unas aceitunas negras en rodajas, unos granos de maíz frito machacados y, finalmente, unos filetitos de anchoa. Todo ello lo salpicamos con la mezcla de aceite y zumo de limón del marinado.

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

Una mezcla de colores, texturas y sabores se darán cita en una superficie lisa, en forma bien de plato bien de fuente, según penséis en servicio individual o colectivo. Lo podéis acompañar de un vinito blanco ligero y suave.

¡Ñam, ñam!




viernes, 13 de enero de 2017

GUACAMOLE DE BRÉCOL (O BRÓCOLI)


Seguramente ya conocéis la receta del guacamole que he publicado ya con anterioridad. Pues, tras haber visto una nueva versión en la revista ¡Hola!, quiero compartirla con vosotr@s. La novedad es el brécol o brócoli. ¡Increíble, pero cierto!

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA

Brécol o brócoli   /   Agua   /   Sal   /   Aceite de oliva virgen extra   /   Cebolla   /   Cilantro o perejil   /   Tomate   /   Perejil   /   Zumo de lima   /   Salsa picante (tipo Tabasco)   /   Nachos o triángulos de maíz

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA

Ponemos a hervir una olla con agua y sal para cocer el brécol, que lavaremos previamente tras haberlo deshecho en ramilletes. En cuanto hierva incorporamos el brécol. Desde este momento hasta que pasen sobre 6 o 10 minutos, momento en que debería volver a hervir, retiramos y atemperamos con agua fría en un escurridor. Cuando estén bien escurridos, lo ponemos en el vaso de la batidora y trituramos y añadimos el zumos de la lima y una pizca de sal. Luego la cebolla, el cilantro y el tomate bien picaditos. Mezclamos bien.

Dejamos reposar en la nevera durante una hora tapado con papel film.

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

En un bol a compartir o en pequeños cuencos individuales, presentamos este particular guacamole de brécol, acompañado de unos nachos o triángulos de maíz. Si veis que está un poco seco, podéis añadir un chorrito de aceite de oliva virgen extra.


¡Ñam, ñam!