viernes, 21 de julio de 2017

PIZZA DE SALMÓN Y DOS QUESOS


El salmón se presta a todo. Hoy lo convertimos en ingrediente principal de una pizza. ¿Qué os parece? Seguro que una vez que la hayáis probado, os animáis a repetirla. No os dará pereza tener que amasar un poco para obtener un resultado digno de cualquier maestro pizzero y buen anfitrión. Esta es un receta para disfrutar con amigos de una buena comida, picoteo o cena. ¡No perdáis la ocasión de luciros!

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA

Lomo de salmón   /   Harina con levadura (especial para pizza)   /   Agua   /   Aove   /   Sal   /   Queso de cabra suave   /   Queso havarti   /   Orégano   /   Pimienta negra   /   Pimiento verde italiano   /   Concentrado de tomate

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA

Comenzamos preparando la masa. Para ello, disponemos en un bol alrededor de 250 g. de harina (yo empleo ya una que incorpora la levadura, pero si no disponéis, no tenéis más que incorporársela vosotros). Añadimos una pizca de sal y hacemos un volcán y en el que verteremos medio vaso de agua templada y un buen chorro de aceite. Mezclamos poco a poco con ayuda de un tenedor o espátula durante un minuto, para luego ya trabajar con las manos. Amasamos bien durante 10 minutos. Si nos pide un poco más de aceite o harina, se la añadimos (pero sin dejarnos llevar). Hacemos una bola con ella y la dejamos reposar durante un mínimos de 30 minutos tapada y en un lugar templado, para que aumente.

Mientras, limpiamos el salmón de espinas y piel, lo cortamos en dados y lo reservamos. Lavamos el pimiento verde y lo cortamos en rodajas, evitando que nos vayan semillas.

Encendemos el horno a 240º. Tras pasar la media hora, retomamos la masa y le damos un nuevo amasado para eliminar el aire que pueda quedar tras la fermentación y procedemos a estirar sobre un papel vegetal, una bandeja untada con aceite o, como en mi caso, una plancha de silicona específica. Le damos forma (yo rectangular) y hacemos un borde doblándola hacia el interior por todo su perímetro.

Comenzamos, luego, a añadir ingredientes. Untamos toda la superficie de la salsa de tomate concentrada, añadimos las rodajas de pimiento y luego el salmón, que aderezamos con un poco de sal y pimienta negra molida. Añadimos, finalmente, los dos quesos: el de cabra suave y el havarti. Finalizamos con un poco de orégano y, si queréis, un poco de aove. Metemos en el horno durante 20 o 25 minutos, estando pendientes de que no se nos queme. Cuando veamos que ya está, o un poco antes, apagamos el horno y dejamos reposar unos minutos.

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

Esta pizza es deliciosa y el salmón os va a quedar muy suave y jugoso. Troceadla en pequeñas porciones y servidla templada. Una buena botella de vino blanco, bien fresquito, complementará su degustación.

¡Ñam, ñam!


No hay comentarios:

Publicar un comentario