ARROZ CREMOSO CON PULPO, MEJILLONES Y GAMBAS

¡Qué agradable es tomar un arroz recién hecho, todavía caliente y jugosito! Hay gente que le gusta que el arroz esté suelto -a mí también-, pero en determinadas preparaciones conviene que esté más cremoso, más pegagosillo, como el caso que hoy os traigo aquí. ¡Ojo, no se trata de una paella! ¡Algún día os prepararé una!
 

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA
 

Aceite de oliva virgen extra   /   Cebolla   /   Ajo   /   Pimiento italiano bicolor   /   Arroz bomba   /   Colas de gamba peladas   /   Mejillones cocidos   /   Rabo de pulpo cocido   /   Sal   /   Azafrán   /   Colorante alimenticio  /   Caldo de pescado   /   Mantequilla ligera
 

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA
 

Iniciamos la preparación de este plato picando un cuarto o más de cebolla junto con dos dientes de ajo. También limpiamos un pimiento italiano que sea bicolor (esto es, con parte verdes y parte anaranjadas tirando a rojas) y lo picamos también.
 

Ponemos a calentar el caldo de pescado y lo reservamos calentito.
 

En una sartén amplia, cazuela o paellera, ponemos a calentar un par de cucharadas de aceite. Cuando esté caliente añadimos la cebolla y el ajo y pochamos unos minutos para luego añadir el pimiento. Salamos un poco.
 

Dejamos que se hagan un poco y añadimos varios puñados de arroz (uno por persona), removiendo bien. Añadimos un pocillo o dos de caldo de pescado y dejamos que se vaya cocinando el arroz. Si vemos que se queda sin caldo, añadimos un poco más y así hasta que esté cocinado del todo. No obstante, a media cocción del arroz, se irán incorporando más ingredientes como son, primero el pulpo picado, luego los mejillones cocidos sin concha y las colas de gamba. Añadimos también unas hebras de azafrán y un poco de colorante alimenticio. Corregimos de sal y cuando esté a punto de la cocción definitiva, añadimos una cucharada de mantequilla ligera, que disolvemos bien removiendo con una cuchara de madera. En cuanto se haya disuelto, retiramos del fuego, tapamos y dejamos reposar unos diez minutos.
 

PRESENTACIÓN       /      PARA LA FOTO
 

En un platito hondo con bordes anchos, o en un plato llano con la ayuda de un aro de emplatar, serviremos una ración de nuestro arroz cremoso. ¡Os vais a chupar los dedos!
 

¡Ñam, ñam!

TARTA DE PERA

Retomo hoy una de las recetas de postres que llevé a cabo en el curso de cocina con Laura: la tarta de pera. Su elaboración es sencilla y su sabor excelente. ¡No perdáis detalle!
 

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA
 

Peras conferencia   /   Azúcar   /   Harina   /   Huevos   /   Mantequilla   /   Levadura Royal

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA
 

La masa de este dulce o tarta la mezclaremos a mano, así que coged fuerza. En un bol mezclamos primero 250 gr. de mantequilla a temperatura ambiente con 200 gr. de azúcar. Cuando estén bien integrados, iremos añadiendo de uno en uno hasta un total de 7 huevos. Mezclamos bien. 
 

Paramos un momento para encender el horno a 180º por arriba y por abajo.
 

A continuación, y volviendo a nuestra mezcla, será el turno de la harina que habremos tamizado con el sobre de la levadura Royal. La incorporamos despacio y poco a poco, mezclando bien y a buen ritmo durante no menos de 5 minutos.
 

Una vez mezclados bien los ingredientes, vertemos la mitad de la masa en un molde redondo previamente untado con mantequilla. Sobre esta base inicial colocaremos una primera tanda de pera -previamente montada y fileteada- para luego cubrir con el resto de la masa y adornar con unos gajos de pera más gruesos y haciendo algún tipo de dibujillo.

Metemos en el horno durante 45 ó 50 minutos, o el tiempo necesario (metemos un palillo y comprobamos que esté cocida nuestra tarta).
 

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

Al sacar la tarta del horno la espolvoreamos con azúcar glass y dejamos que enfríe. Una vez fría, la podéis degustar como y cuando queráis.
 

¡Ñam, ñam!

FAJITAS DE LOMO DE CERDO

Las fajitas o tortitas al estilo mexicano admiten muchos ingredientes en su interior. Quizás estemos más acostumbrados a que incluya pollo, pero hoy os las traigo con lomo de cerdo. ¡Tomad nota!
 

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA
 

Lomo de cerdo fileteado   /   Pimienta negra molida   /   Sal   /   Tomillo   /   Romero   /   Aceite de oliva virgen extra   /   Pimiento rojo   /   Pimiento verde   /   Calabacín   /   Vino blanco   /   Cebolla   /   Salsa de soja   /   Ajo
 

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA
 

Comenzaremos cortando los filetes de lomo en tiras no muy finas y, tras introducirlas en un bol, los aliñamos con una pizca de sal, un diente de ajo picadito, pimienta negra, tomillo, romero, aceite y salsa de soja. Dejamos reposar durante media hora, tapado con film.
 

Mientras tanto, limpiamos bien los pimientos y la cebolla y los cortamos en tiras. Hacemos lo mismo con el calabacín, que simplemente habremos lavado.
 

En una sartén a fuego medio alto, vamos a sofreír las tiras de solomillo, de manera que cojan un colorcillo. Las retiramos y reservamos. En la misma sartén, pochamos la cebolla y el pimiento verde en un primer golpe de calor, tras unos minutos añadimos el pimiento rojo y, finalmente, el calabacín junto con el lomo que teníamos apartado. Corregimos de sal y si vemos que se nos queda un poco seco, añadimos un chorro de vino blanco. Cuando veamos que está todo hecho, sólo faltará rellenar las fajitas.
 

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO
 

Calentamos las fajitas en el microondas envueltas en un trapo durante 15 segundos para que ablanden un poco. Las sacamos y las rellenamos a nuestro gusto.
 

¡Ñam, ñam!

CREMA DE ORUJO

¿Para qué comprar una botella de crema de whisky si podemos hacer nosotros una deliciosa crema de orujo o aguardiente casera y sabiendo lo que lleva? ¿Verdad? Pues os voy a dar las claves para que triunféis en la sobremesa con un buen chupito. ¡Ahí va! ¡Saludos para Laura!

 

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA

 

Leche condensada   /   Aguardiente   /   Flan de vainilla   /   Cacao   /   Café

 

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA

 

En un bol amplio mezclamos la misma cantidad de leche condensada y de aguardiente. Yo he aprovechado el bote de leche condensada (de 400 gr.) para tomar la medida del aguardiente. Mezclamos con la batidora de mano. 

 

Preparamos un poco de café y añadimos un pocillo a la mezcla, junto con un flan de vainilla y un par de cucharas de postre de cacao puro. Trituramos y mezclamos nuevamente.

 

Sencillo, ¿verdad?

 

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

 

Volcamos el contenido de nuestro bol en una botella de cristal transparente y bonita con la ayuda de un embudo. Si queréis podéis pasar la mezcla por un colador, pero creo que no va a ser necesario. Metemos la botella en la nevera y dejamos que enfríe. ¡Que empiece la fiesta!

¡Ñam, ñam!

VERDURITAS SALTEADAS BAJO SÁBANA DE JAMÓN

Las huertas están ya empezando a dar sus frutos y por eso he pensado en una receta en la que tengan cabida y se pueda disfrutar de su sabor intenso.

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA

Calabacín   /   Cebolla tierna   /   Brécol   /   Zanahoria   /   Espárragos trigueros tiernos   /   Jamón serrano en lonchas   /   Sal   /   Aceite de oliva   /   Aceite de pimientos   /   Salsa de soja

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA

Lavamos bien las verduras. El calabacín y la zahanoria los cortamos en tiras o láminas de no más de un centímetro de ancho. La cebolla la cortamos en juliana. El brécol en pequeños ramilletes y los espárragos trigueros, tras quitarles las puntas que son más tiernas, también en tiras.

Calentamos agua con sal y en cuanto hierva, incorporamos las verduras y las escaldamos durante 4 ó 5 minutos, pasándolas inmediatamente a una bañera con agua muy fría (con hielos si hace falta) para que no pierdan su bonito color original.

A continuación, calentamos un wok y en él salteamos las verduritas en un poco de aceite y salamos al gusto. Podemos incorporar durante el salteado unas gotas de salsa de soja y de aceite de pimientos, o esperar a hacerlo en el emplatado.

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

En un plato hondo colocamos una base de verduritas y, aunque hayamos puesto aceite de pimientos durante el salteado, podemos utilizarlo nuevamente para adornar el plato. Tapamos las verduritas calentitas con una o más lonchas de jamón, lo que hará que su grasita de derrita un poco y transmita algo de su esencia a las verduritas.

¡Ñam, ñam!

SAN JACOBO CON ACELGA Y PAVO

La acelga es una verdura un poco insípida que suele emplearse en las cremas de verduras para darles una tonalidad y espesura muy característica. No obstante, se puede utilizar en otras recetas desempeñando funciones realmente curiosas, como lo que hoy aquí os presento. ¡Al loro!

 

INGREDIENTES      /      MATERIA PRIMA

 

Hojas de acelga con sus pencas (tallos)   /   Pechuga de pavo en lonchas   /   Queso en lonchas   /   Harina   /   Huevo   /   Aceite de oliva   /   Agua   /   Sal

 

ELABORACIÓN      /      MANOS A LA OBRA

 

Lo primero que haremos será lavar bien las hojas de acelga y quitarles, como si las quisiésemos pelar, desde la penca, una especie de película fina que sería muy desagradable encontrar en algún bocado. Una vez limpias, separamos las pencas de las hojas y las ponemos a cocer en un cazo con agua y sal durante no más de 10 minutos. Una vez cocidas, las reservamos y escurrimos, y en el mismo agua, escaldamos durante 2 ó 3 minutos las hojas sin romperlas, que también reservaremos.

 

Las pencas las cortaremos en dos mitades iguales y, del mismo tamaño, cortaremos trozos de loncha de pechuga de pavo y de queso. De este modo montaremos nuestros San Jacobos: primero una porción de penca, luego de pavo y queso y terminamos con otra de penca. Echamos un poco de pimienta molida. A continuación, envolvemos y hacemos un paquetito con la hoja de acelga y rebozamos con harina y huevo batido, friéndolo en una sartén con aceite. Doramos por ambos lados y retiramos a un papel absorbente. ¡Listo!

 

PRESENTACIÓN      /      PARA LA FOTO

 

En un plato colocamos nuestro San Jacobo de acelga y si queremos lo partimos por la mitad para ver como ha fundido el queso. Podemos acompañar con un poco de mermelada o salsa de tomate casera.

 

¡Ñam, ñam!